En Expoáguilas apostamos por la polinización y fecundación natural de todos los cultivos de tomate. Para ello, utilizamos abejorros de la especie Bombus Terrestris. Así garantizamos la obtención de productos de alta calidad de una forma 100% natural.
Usamos el abejorro para este proceso y no las abejas debido a que la flor del tomate carece de néctar, el alimento de las abejas, y los abejorros necesitan el polen como fuente de proteínas para sus crías. BioMip es la marca en la que confiamos y con la que trabajamos en nuestros cultivos.
Los abejorros presentan ventajas frente a las abejas en su uso para la polinización:
El abejorro muerde el androceo, tubo de estambres, clavándole sus mandíbulas y haciendo vibrar el cuerpo. Con su abdomen tapa la salida de los estambres para así lograr que el polen que se va desprendiendo se adhiera en los pelos de su cuerpo. Con el abejorro no se desperdicia nada, y alisa todos esos pelos para dejarlos planos. La misión termina cuando realiza la misma operación en otra flor.
Los factores que afectan a que cuaje más o menos son las altas temperaturas, ya que si durante el día supera los 35ºC y durante la noche 25ºC se disminuye el número de granos de polen. También afecta la humedad relativa ya que hace que el polen se compacte y esto dificulta su polinización. Además, la humedad baja hace que se seque antes de germinar. Otro factor es la fertilización, ya que si la planta no tiene una nutrición equilibrada puede provocar que la floración y el cuajado sean pobres. Finalmente, la sanidad de la planta es el factor clave en este proceso y tenerla alejada de los trips.
Desde Expoáguilas, apostamos por la naturalidad de nuestros productos y por realizar el proceso de la forma más sostenible posible para lograr un resultado eficiente y responsable.